En las ruinas del neoliberalismo
El ascenso de las políticas antidemocráticas en Occidente
El ascenso de las políticas antidemocráticas en Occidente
The COVID-19 crisis has not only made the world's existing inequalities even more evident; it has even deepened them. Women face a heavy burden of unpaid and care work, loss of income and jobs, and make up a more significant portion of the poor. This article will discuss the growing gender gap in employment and the effects of the pandemic on the gender gap in the Latin American region.
La crisis por COVID-19 no sólo ha hecho aún más evidentes las desigualdades ya existentes en el mundo, sino que incluso las ha profundizado. Las mujeres enfrentan una sobrecarga de trabajo no remunerado y de cuidados, pérdida de ingresos y empleos, además de estar sobrerrepresentadas en la pobreza. En este artículo se hablará del crecimiento de la brecha laboral entre los sexos y los efectos que ha tenido la pandemia sobre ésta misma en la región latinoamericana.
La pandemia de COVID-19 causada por el nuevo virus SARS-CoV-2 ha trastocado de forma radical la realidad económica, social y política mundial en un proceso que todavía no ha llegado a su fin. Al momento de escribir esta introducción, todavía existe una gran incertidumbre sobre la devastación humana que causará la pandemia a nivel planetario; sobre la duración, profundidad y consecuencias de largo plazo de la crisis económica que generó la pandemia; y sobre las implicaciones políticas que tenga al interior de cada nación y en el conjunto con la geopolítica mundial.
El compromiso chino a través de inversiones financieras y cooperación contractual para el año 2021 en los 144 países de la Iniciativa de la Franja y la Ruta fue de unos 59.500 millones de dólares. De este compromiso, alrededor de 13 900 millones de USD se realizaron a través de inversiones y 45 600 millones de USD a través de contratos (parcialmente financiados por préstamos chinos). El compromiso general de China es un desarrollo constante en comparación con 2020, cuando el compromiso chino fue de aproximadamente US $ 60,5 mil millones.
After a 2021 with a smaller rebound than expected and with high commodity prices, a strongly negative real interest rate in the US, Great Britain, Europe and Japan, the year 2022 starts with great uncertainties. We will review the main global variables at play in the year and the repercussions this may have on Latin America.
The US economy, with large fiscal deficits, has very low growth rates and does so with the support of a very expansive monetary policy that has been partially responsible for inflation in the world. What is unprecedented is that the rate of investment does not seem to be altering.
Después de un 2021 con un rebote menor del esperado y con un nivel de precios de commodities alto, una tasa de interés real fuertemente negativa en EEUU, Gran Bretaña, Europa y Japón, el año 2022 se inicia con grandes incertidumbres. Se revisarán las principales variables globales en juego en el año y las repercusiones que puede tener sobre América latina.
La economía de Estados Unidos, con grandes déficits fiscales tiene muy bajas tasas de crecimiento y lo hace con el apoyo de una política monetaria muy expansiva que ha resultado parcialmente responsable de la inflación en el mundo. Lo inédito es que la tasa de inversión no parece alterarse.
Creciente número de casos, una recuperación interrumpida y mayor inflación
La inflación no es tan mala como una crisis financiera, particularmente cuando los aumentos de los precios coinciden con una rápida mejora de la economía. Y mientras las crisis financieras pueden ser inherentemente impredecibles, pronosticar la inflación es una característica esencial del modelado macroeconómico.
¿Por qué, entonces, casi todos entendieron tan mal la historia de la inflación en Estados Unidos el año pasado? Una encuesta de 36 pronosticadores del sector privado en mayo reveló un pronóstico de inflación mediana del 2,3% para 2021 (medido por el índice de precios del gasto en consumo personal, el indicador de facto que utiliza la Reserva Federal de Estados Unidos).
En general, el grupo asignó una posibilidad del 0,5% de que la inflación superara el 4% el año pasado –pero, por la medición del PCE (por su sigla en inglés), parecería que va a ser del 4,5%.
Este informe fue preparado bajo el liderazgo de Lucas Chancel y también coordinado por Thomas Piketty, Emmanuel Saez y Gabriel Zucman. Es producto de una acumulación incesante de datos que hace posible brindar mejores respuestas a casi todas las preguntas que queremos hacer sobre lo que está sucediendo con la desigualdad en todo el mundo. La respuesta no es bonita.