A nivel mundial, la inflación cerró 2021 con su nivel más alto de los últimos veinte años (40 años en el caso de EEUU) y las proyecciones indican que durante 2022. Sin embargo, aunque sea más baja que la del año pasado, seguiremos viéndola alta en 2022. ¿Por qué es una de las principales preocupaciones de gobiernos, bancos centrales y consumidores?
A los gobiernos les preocupa que los bancos centrales aceleren la normalización de los tipos de interés ante las altas tasas de inflación. Esto frenaría la recuperación económica y la creación de empleo y, en algunos casos, provocaría el deterioro de los saldos fiscales de algunos países que adquirieron deuda para mitigar los efectos de la contracción o desaceleración económica.
Las estrategias que sigan los gobiernos y los bancos centrales para controlar la inflación determinarán las condiciones económicas de los años siguientes y la capacidad del mundo para recuperarse de la contracción económica de 2020.