Hemos entrado a la segunda mitad del año y la volatilidad internacional se ha incrementado con la abrupta subida del precio de los alimentos y combustibles, creando un ambiente de incertidumbre a nivel global. Tanta incertidumbre, anima desde siempre nuestra curiosidad por tratar de explicar el fenómeno desde una perspectiva global y conocer qué distintos escenarios de inserción se abren a nuestros países, durante y después de la crisis.
La laxa política monetaria y regulatoria de las últimas dos décadas creó una arquitectura financiera muy compleja de mecanismos (intra e inter paises) de transmisión de crisis que vinculan mercados, inversionistas y regiones.
Ligan también a la banca tradicional y las oscuras operaciones de la banca de inversión "en la sombra", como la bautizara el NYT hace poco con motivo del "remate de emergencia" del Bear Stearns. En abril del 2008 - tardíamente- el FMI alertó del peligro de la extensión de esta crisis hipotecaria (en EEUU) a otros mercados (en primer lugar de bonos hipotecarios).[1]. Advirtió también de sus "profundos efectos de retroalimentación macroeconómica".
[1] Credit Crisis Is Broadening IMF Warns Global financial stability report.. By Laura Kodres IMF Monetary and capital Markets Department April 8, 2008.