El crecimiento mundial se desacelerará hasta el 2023, lo que contribuirá al riesgo de un "aterrizaje brusco" en las economías en desarrollo
Después del repunte de la economía registrado en 2021, se espera que en los próximos años la economía muestre grandes signos de desaceleración debido a la incertidumbre derivada de la inflación, la deuda y la desigualdad del ingreso mientras las políticas económicas se disipan.
Se pronostica que la desaceleración tendrá diferentes ritmos en los países desarrollados y en desarrollo. En los países desarrollados se prevé una desaceleración más fuerte que en resto. Sin embargo, las economías desarrolladas habrán recuperado su nivel de actividad económica prepandemia, mientras los países en desarrollo serán más vulnerables.
El incremento de la deuda, los ciclos de precios de los productos básicos y la creciente desigualdad del ingreso a nivel mundial son los tres grandes obstáculos de la recuperación económica, y las políticas de los países deben in encaminadas a resolver estos problemas.